Cantabria nos ofrece diversidad, desde las verdes montañas a sus playas podemos realizar multitud de rutas y descubrir lugares de una gran belleza.
Nuestra primera visita a tierras cantabras la realizamos hace ya unos cuantos años, estuvimos una semana en Isla y nos gusto bastante por lo que decidimos que volveríamos.
Han pasado ya unos cuantos años , creo que unos trece , y lo prometido es deuda, así que decidimos que había llegado el momento de volver y buscar esa Cantabria infinita que tanto deseábamos
La vez anterior estuvimos en el camping de Isla y ahora tocaba buscar alojamiento rural.
Durante el proceso de búsqueda encontramos bastantes alojamientos rurales de calidad y la decisión fue un tanto difícil pero al final lo encontramos, aunque tuvimos que Llegado el momento nos pusimos mano a la obra y buscamos alojamiento, la vez cambiar la fecha de nuestras vacaciones para el mes de septiembre ya que la casa rural no tenia disponibilidad hasta ese momento, pero mereció la penaBuscábamos un lugar que tuviera poca afluencia de turismo y que su situación nos permitiese movernos tanto por la zona de montaña como por la costa y que además reuniera las condiciones necesarias para que las viajeras disfrutaran también de su paso por Cantabria y la búsqueda nos llevo al municipio de Riotuerto
Riotuerto |
La casa rural
Entrada a La Pinia |
Estuvimos alojados en la casa rural La Pinia , desde aquí un saludo para Chus que es su propietario, esta perfectamente acondicionada y no le falta detalle, además de reunir todas las condiciones necesarias para las viajeras: una gran parcela donde ellas podían correr a sus anchas y unas esplendidas vistas de toda la zona para nuestro disfrute.
Al encontrarse la casa a tan solo 20 minutos de las playas y a la vez en la montaña ofrece la posibilidad de realizar diversas rutas¿ Y tu que miras? |
Nuestra primera ruta consistió en buscar alguna playa donde pudiésemos gozar del lugar tanto nosotros como las viajeras, y la verdad no fue fácil
Encontramos el cartel de prohibido perro en todas las playas por lo que la tarea nos llevo una tarde entera de playa en playa asta que encontramos la adecuada. La playa de Langre (pequeña) por tener un difícil acceso se convirtió en el lugar adecuado para que las viajeras y nosotros pudiésemos disfrutar relajadamente de un entorno magnifico.
Todos los que viajamos con nuestras mascotas sabemos de la guerra abierta que hay hacia nosotros, se nota a cada paso que das, las miradas y los comentarios casi siempre son hirientes
¿ por que yo no puedo? |
Un buen bañito |
Playa de Langre(pequeña |
Puerto de Santoña |
Playa de Berria |
Si seguimos por la carretera que da acceso a la casa rural llegamos al mirador del puerto de las Alisas, desde allí podemos disfrutar de unas magnificas vistas de la zona además de poder dar un buen paseo con nuestras mascotas, las praderas son infinitas y nos invitan a echar unas carreritas por ellas, pero cuidado no os llevéis una sorpresa y terminéis pisando una caca de vaca, la zona es propicia para la cría del ganado y las vacas pastan por las praderas.
Vista desde el Mirador de las Alisas |
A tan solo 20 minutos de la casa se encuentra Santander por lo que aunque la casa rural da sensación de aislamiento, sensación buscada por nosotros cuando buscamos alojamiento, lo cierto es que te encuentras cerca de la capital pero sin el agobio de la misma, reconozco que las veces que hemos estado por la zona en ninguna ocasión hemos ido a visitar Santander, pero como a las viajeras les encanta la zona y la casa rural seguiremos visitando la zona en mas ocasiones
Vista desde la casa rural |
Desde aquí os animo a visitar la zona con vuestras mascotas, vais a disfrutar de lo lindo, solo daros unas recomendaciones: siempre respetar el entorno donde os encontréis, es preciso que seamos conscientes que se puede disfrutar de lo que la Naturaleza nos ofrece de una manera armoniosa y dejaros llevar por ella , solo así nuestros sentidos aletargados despertaran y si observamos como nuestras mascotas se comportan en el medio natural podremos aprender a respetar lo que nos rodea.
En pleno juego |
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